¿Por qué Yoga Restaurativo?

En la actualidad, todos llevamos una vida acelerada que, a veces, parece estar repleta de estrés, y puede resultar difícil encontrar una buena forma de aliviar esa tensión y encontrar el equilibrio interior. El yoga restaurativo se está volviendo cada vez más popular por la forma en que puede ayudar a encontrar la paz, la relajación y el equilibrio en medio del caos de la vida cotidiana. Y, aunque no es tan dinámico y complejo como otras variedades de yoga, el yoga restaurativo ofrece, no obstante, una gran cantidad de posibles beneficios para la salud y el bienestar.

Lo que diferencia al yoga restaurativo de otros estilos de yoga es su simplicidad general. A diferencia de otros estilos de yoga que se basan en la realización de una multitud de posturas diferentes para lograr la relajación y el alivio del estrés, al mismo tiempo que se aumenta la flexibilidad y la fuerza muscular, el yoga restaurativo implica, en cambio, solo unas pocas posturas simples que se mantienen durante un tiempo, sin contracciones musculares extenuantes en absoluto; ocasionalmente se utilizan accesorios para ayudarlo a relajarse y descansar mejor mientras mantiene estas posturas. El yoga restaurativo puede ser particularmente útil para cualquier persona que tenga una enfermedad crónica o que se esté recuperando de una lesión o enfermedad debido a lo simple y relajante que es (con una tensión mínima para el cuerpo).

Algunas de las posturas más comunes del yoga restaurativo incluyen flexiones hacia adelante en posición sentada, giros suaves, flexiones suaves hacia atrás y otros estiramientos de bajo impacto. Estas posturas se eligen por su simplicidad, por cómo pueden estirar los músculos sin forzarlos y por cómo se pueden mantener durante unos minutos para estimular la relajación y aliviar la tensión en los músculos y las articulaciones. La práctica del yoga restaurativo también incluye técnicas de respiración profunda, que pueden ayudar a reducir tanto la presión arterial como la frecuencia cardíaca, al tiempo que fomentan un estado mental más relajado y tranquilo.

Algunos de los posibles beneficios del yoga restaurativo incluyen (entre otros) una mayor flexibilidad, una mayor relajación en todo el cuerpo y un refuerzo del sistema inmunológico y del sistema nervioso. También te resultará más fácil alcanzar la paz mental y el equilibrio interior, y posiblemente incluso experimentes un estado de ánimo elevado y mejorado.

El sistema nervioso en particular se beneficia del yoga reparador, gracias a la respiración profunda y al ejercicio a un ritmo más lento (especialmente los estiramientos y flexiones largos) que activan el sistema nervioso parasimpático, lo que puede ayudar a relajar el cuerpo y aliviar los efectos del estrés en el cuerpo (en particular el estrés asociado con la respuesta de lucha o huida, que puede ser perjudicial para el cuerpo a largo plazo si se activa con demasiada frecuencia debido a un entorno laboral o doméstico estresante).

El yoga restaurativo también es bueno para aumentar la atención plena, gracias al ritmo lento del ejercicio y a la forma en que los ejercicios suaves y fáciles lo alientan a relajar tanto el cuerpo como la mente, así como a buscar su equilibrio interior. El estado meditativo que muchas personas pueden lograr durante las sesiones de yoga restaurativo también puede ayudar con la introspección y la autoconciencia, e incluso potencialmente ayudar a una mayor conciencia de su cuerpo físico y su conexión no solo con su propia mente y espíritu, sino también con el resto del mundo.